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Como definen los ateos que es bueno y que es malo

Por: Bruno Moreno // Fr. Nelson Medina, OP | Fuente: Blog Espada de Doble Filo // fraynelson.com
Sin Dios, ¿cómo defines lo que es bueno? Si sólo somos un montón de formas de vida surgidas accidentalmente en una roca sin sentido, ¿cómo se puede definir el término “buena persona”?
Traduzco hoy unos párrafos curiosos sobre el ateísmo que he leído en un blog norteamericano (Creative Minority Report). Aunque breves y con un lenguaje algo vago, resultan provocativos y creo que podrían ser un buen punto de partida para una interesante discusión sobre el ateísmo y la moralidad.
A mi entender, el punto más débil del pensamiento de los ateos modernos está en que su propio materialismo les lleva a posiciones contradictorias con todo aquello que hace humano al ser humano, tanto en general como en su caso particular, incluida la moral. Esta contradicción interna entre teoría y práctica, entre posturas intelectuales y vida concreta, entre ateos-que-no-creen-en-el-bien y ateos-que-se-comportan-bien (casi me atrevería a decir entre fe ateo-materialista y realidad) produce una curiosa tensión que, al menos desde fuera, resulta fascinante.
Yo no plantearía la cuestión como los párrafos traducidos, pero me parece muy curioso que precisamente lo que le llama la atención al bloguero norteamericano, hasta ahora, siempre se haya cumplido en este blog. Creo que sería interesante reflexionar sobre eso.
……………………………………
No creo que los ateos no puedan ser gente buena. Lo que me llama la atención es que nunca he encontrado a un ateo que no creyera que era una buena persona. Porque, y aquí está el quid de la cuestión, ¿cómo definen lo que es bueno? Esa es la parte que siempre me confunde. Sin Dios, ¿cómo defines lo que es bueno? Si sólo somos un montón de formas de vida surgidas accidentalmente en una roca sin sentido, ¿cómo se puede definir el término “buena persona”?
Para muchos ateos, lo bueno es simplemente lo que ellos son. Su código de conducta es lo que piensan que es. Solamente significa que son buenos en ser lo que quiera que sean. Así que dan en la diana de “buena persona” un 100% de las veces. No pueden fallar.
Creo, sin embargo, que muchos ateos aceptan algunos presupuestos del cristianismo sin creer en Dios, pero otras reglas no les gustan, así que no las siguen. Así pues, según sus propias reglas, son gente buena, porque siguen las reglas que quieren seguir.
Al texto antrior agregamos lo que Fray Nelson comenta: Los ateos que conozco tienden a definir el bien en cuatro líneas preferenciales:
Lo natural es bueno. Ejemplo: el deseo de comer es natural, luego comer debe ser bueno. El deseo sexual es natural, luego es antinatural suprimirlo, y eso es malo.
Lo participativo es bueno. Ejemplo obvio: las decisiones democráticamente establecidas después de seguir los procesos legales vigentes son buenas y son la norma para la sociedad. Si alguno se opone, por ejemplo: una enfermera que no quiere contribuir de ningún modo a un aborto voluntario, entonces la ley debe castigar a la enfermera porque está obrando mal.
Lo auténtico es bueno. Ejemplo: si una persona se dedica a lo que le gusta y lo hace con pasión y convicción, y lo que piensa lo dice, y lo que dice es modelo de cómo obra, eso es bueno. Basta la coherencia interna porque en ella está la paz de cada uno, y de ahí viene la paz en la sociedad cuando vivimos y dejamos vivir.
Lo razonable es bueno. Ejemplo obvio: la ciencia. Si en cambio algo no se ha demostrado científicamente, como, según ellos, sucede con los daños a los niños educados por parejas de homosexuales, entonces es dogmatismo, oscurantismo o algún otro "ismo" conectado seguramente con los prejuicios y supersticiones de la fe.
No es difícil ver cómo estos criterios son insuficientes y a menudo contradictorios pero como siempre se puede apelar a lo que cada uno sienta que lo deja en paz... pues así van y así siguen.

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